PROHIBICIÓN DE SUBCONTRATACIÓN LABORAL AFECTARÁ ECONOMÍA
Por: Redacción
@MiDelegacionQro
La Confederación Patronal de la
República Mexicana (Coparmex) -tal como lo ha manifestado de forma pública en
los foros que fueron convocados por el Poder Legislativo en su momento-, no
está de acuerdo con cualquier expresión de actividades ilegales que, escudadas
en la figura de la subcontratación laboral, han venido lucrando indebidamente y
defraudando al erario, generando competencia desleal, lesionando los derechos
laborales y de seguridad social de los trabajadores, así como dejándole enormes
pasivos a las empresas que las han contratado de buena fe.
Apoyamos cualquier esfuerzo para
acabar con estas actividades fraudulentas, pero sin perder de vista que existe
una muy importante actividad económica y de generación de empleo formal y
digno, que se genera por medio de la subcontratación laboral que sí cumple con
todos los estándares legales de cumplimiento.
Si la subcontratación laboral es
empleada de forma correcta, conforme a las leyes, pagando las obligaciones
sociales de los trabajadores -tal y como corresponde-, así como las
obligaciones fiscales debidas, esta figura utilizada y reconocida en todo el
mundo, apoya también al fomento del empleo, a la economía formal y a la
inversión.
Pensar en una la prohibición
total de la subcontratación laboral, conocida popularmente como “outsourcing”,
será una grave afectación más al deteriorado panorama, con la que se perderían
una cantidad muy importante de empleos legítimos debidamente remunerados, que
impulsan nuestra recuperación económica.
Invitamos de nueva cuenta a que
los argumentos de la Coparmex sean considerados, aunado a que se respeten los
compromisos establecidos y acordados en diversas reuniones, tal como la
convocada por la Junta de Coordinación Política (JUCOPO) del Senado de la
República.
También exhortamos a que se
respeten los principios constitucionales para así generar seguridad jurídica a
las inversiones, que son la principal fuente de empleo formal en este país.
Además de que se castigue a los evasores, pero sin afectar la libertad de empresa,
ni a la inversión y al desarrollo económico que tanto necesitamos.