RECIBE BÖTSI A NIÑO QUE HABITA CON SU MAMÁ EN EL CERESO FEMENIL
Por: Redacción
@MiDelegacionQro
La Presidenta del Patronato del
Sistema Municipal DIF, Arahí Domínguez, recibió en uno de los Centros
Integrales de la Niñez “Bötsi”, a un menor de dos años y tres meses que desde
su nacimiento habita con su madre privada de la libertad en el Centro
Penitenciario Femenil CP2. El objetivo
es apoyar al menor con acompañamiento educativo y atención psico-emocional, que
le ayude a una adecuada incorporación a su vida familiar, social y comunitaria
fuera del penal; un procedimiento que se realiza por primera ocasión en México.
Esta labor se consiguió gracias a
una efectiva coordinación entre: la Comisión Estatal del Sistema Penitenciario
de Querétaro, a través del Sistema de Justicia Penal Acusatorio del Estado
“COSMOS”; la Procuraduría Estatal de Protección de los Derechos de las Niñas,
Niños y Adolescentes del Sistema Estatal DIF; y el Sistema Municipal DIF a
través de la Coordinación de los Centros Bötsi.
Mayra Reséndiz Piña, Coordinadora
de los Centros Bötsi del Sistema Municipal DIF, informó que tras cumplir con el
protocolo general de revisión, el menor fue incorporado al área de Maternal A,
donde recibirá orientación sobre aprendizajes fundamentales para un desarrollo
infantil saludable, como es la estimulación del lenguaje, el control de
esfínteres y el desenvolvimiento de sus capacidades sociales.
El trabajo también implicará un
seguimiento puntual y atención a las áreas del aprendizaje en las que el niño
pueda presentar un desarrollo deficiente, derivado de su falta de convivencia
con más niñas y niños de su edad y las
condiciones generales de su entorno social al interior del Centro Penitenciario
Femenil CP2.
“Es el primer niño que nosotros
como Bötsi recibimos dentro de las instalaciones. Fue todo un proceso, fue una
petición por parte del penal, el que el niño pueda incorporarse. El objetivo es
que logre desarrollarse con niños de su edad. Para que cuando el salga, pueda
incorporarse a la sociedad de una manera adecuada y no tenga un impacto
negativo, sino al contrario”, dijo.
Durante este proceso de
adaptación, el menor contará con la orientación y el cuidado permanente de una
maestra y una enfermera para procurar su sano desarrollo social y educativo
hasta los tres años de edad, momento en el que podrá comenzar a desenvolverse
en un contexto social externo al Centro Penitenciario Femenil -donde es
atendido bajo los marcos de la estrategia de Protección Integral para la
Garantía de Derechos de Niñas y Niños que viven en Centros Penitenciarios,
“Piltsintli”-.